24 abril 2006
Este viernes me dejaron unas agujitas clavadas en la oreja. En principio parece algo doloroso y casi sádico, pero la verdad es que ya me he acostumbrado a ellas. Les he cogido cariño en un par de días... Casi no me molestan y creo que me pueden ser muy útiles para alguna emergencia. Creo que para la próxima sesión pediré que me dejen algunas de reserva, por lo que pueda pasar. A ver si tienen algunas tamaño alfiler, por si se me descose algún botón en una situación difícil. Poco a poco me puedo convertir así en una especie de navaja suiza andante.
2 Comments:
Pues sí, serías practiquísimo, la verdad. Como se entere tu madre te mete en el necesser.
Qué bonita estampa!! Como un personaje de Tim Burton.
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